jueves, 21 de febrero de 2013

ALTEA, ALICANTE
























          Para subir a la plaza de altea lo más fácil es subir por la cuesta de las narices (os podéis imaginar porque se llama así, si queréis subir andando desde el paseo marítimo de Altea, preparaos porque es una subida fuerte de unos 25 minutos andando, en coche son 5 minutos; recomendación si vas en coche: lo mejor es aparcar en el parking gratuito del Palau), pero la subida merece la pena.

    A la plaza se puede acceder desde diferentes calles, todas llevan a la plaza. La podréis ver desde lejos por su iglesia que es el eje central. El encanto empieza en las propias calles peatonales y empedradas, con una selección de tiendas de moda, joyerías, galerías de arte, con las balconadas (son exposiciones colectivas de los estudiantes de bellas artes de Altea, la cual tiene mucho prestigio).

Una vez en la plaza puedes disfrutar de los puestos artesanales, artístas, varios miradores donde se puede ver todo el pueblo de Altea: su paseo marítimo, el puerto, la playa de Albirr y de la Olla, y sobre todo disfrutar de un buen atardecer, que convierte al mar de Altea en un mar de plata, precioso.

Una vez vista la plaza lo ideal es bajar por alguna de sus calles hacia el otro lado de la iglesia, y recorrer sus calles y por último terminar cenando en alguno de sus buenos restaurantes. Y si quieres terminar bien el día puedes tomarte una copa en alguno de sus bares de la plaza.

   Sacado de:  http://www.minube.com/rincon/plaza-de-altea-a4296 

1 comentario:

Anónimo dijo...

Fuí hace 6 años y me quedé enamorado de aquel sitio. Gracias, he vuelto a pasear por allí.